¿Es seguro beber kombucha? Precauciones, contraindicaciones y efectos secundarios

Ten en cuenta que todo tiene su lado positivo y su lado negativo. No existe tal cosa como una bebida milagrosa que todo lo cura y que no cause daños si se consume en exceso.

La kombucha también contiene pequeñas cantidades de alcohol, que es natural y un subproducto del proceso de fermentación. A medida que la bebida fermenta, la levadura convierte el azúcar en etanol, un tipo de alcohol. Dependiendo del tiempo de fermentación, el contenido alcohólico final puede oscilar entre el 0,5% y el 3% de alcohol por volumen, similar al de la mayoría de cervezas y vinos. Es importante señalar que, por lo tanto, las personas embarazadas deben evitar beber kombucha.

Conoce con más detalle la verdad acerca del contenido de alcohol en la kombucha.

Además, las personas con el sistema inmunológico debilitado o las que toman ciertos medicamentos deben hablar con su médico antes de consumir kombucha, ya que puede interactuar con algunos fármacos.

Así pues, si te encuentras dentro de uno de estos grupos, asegúrate de consultar con tu médico o abstente de beber kombucha:

• Embarazo (ten especial precació a la hora de incorporar esta bebida a tu dieta si estás en estado de embarazo o en período de lactancia).
• Sistema inmunitario debilitado
• Alcoholismo y adicción
• Consumo de algunos medicamentos

Evita la kombucha si estás tomando alguno de estos medicamentos

Como mencionábamos, debes consultar con tu médico acerca del consumo de esta bebida, si estás tomando ciertos medicamentos. Esto no es para alarmarte; la kombucha es una gran bebida con muchos beneficios, pero a fin de cuentas, lo importante es mejorar tu calidad de vida, no al contrario.

A continuación, te proporcionamos algunos ejemplos de medicamentos que, según los estudios, pueden interactuar negativamente con la kombucha:

• Antibióticos: algunos tipos de antibióticos, como la tetraciclina, pueden verse afectados por los ácidos presentes en la kombucha y reducir su eficacia.
• Medicamentos anticoagulantes: la kombucha contiene vitamina K, que puede interferir con la acción de los anticoagulantes como la warfarina y la heparina, lo que aumenta el riesgo de sangrado.
• Inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAOs): la kombucha puede contener tiramina, un aminoácido que puede interactuar con los IMAOs, un tipo de medicamento utilizado para tratar la depresión y otros trastornos.
• Medicamentos para la diabetes: algunos estudios han demostrado que la kombucha puede reducir los niveles de azúcar en sangre, lo que puede interferir con la acción de los medicamentos para la diabetes.
• Medicamentos para la presión arterial: la kombucha puede tener un efecto hipotensor, lo que significa que puede reducir la presión arterial. Si se combina con medicamentos para la presión arterial, esto puede llevar a una reducción excesiva de la presión arterial y posibles efectos secundarios.

Dicho esto, para los que no entran en estas categorías, la kombucha puede disfrutarse con moderación como una bebida alternativa ocasional que aporta beneficios para la salud junto con probióticos, antioxidantes y compuestos desintoxicantes.

La kombucha y sus posibles efectos secundarios

Cuando se trata de alimentos y bebidas que promueven la salud, es fácil caer en la tentación de creer que “más es mejor”. Sin embargo, es importante recordar que todo lo que tiene poder debe ser manejado con responsabilidad y precaución, incluyendo la kombucha.

Aunque esta bebida fermentada puede tener múltiples beneficios para la salud, es importante ser consciente de los posibles efectos secundarios y contraindicaciones de su consumo.

Esta es una lista de algunos posibles efectos secundarios producidos por la kombucha. Ten en cuenta que no son una regla y no se presentan a menudo. Lo más importante es que observes cómo reacciona tu cuerpo, pues el bienestar físico nace de tu capacidad para escuchar y atender de manera armónica a tu organismo.

• Dolor de estómago: pese a sus grandes propiedades para el sistema digestivo, algunas personas pueden experimentar dolor después de beber kombucha, debido a su acidez.
• Diarrea: el consumo excesivo de esta bebida puede causar gastroenteritis y diarrea en ciertas personas.
• Gases e hinchazón: la kombucha puede provocarlos en organismos sensibles, especialmente si se consume en grandes cantidades.
• Reacciones alérgicas: la kombucha puede contener alérgenos como el té o las frutas utilizadas para su elaboración, lo que puede provocar este tipo de reacciones.
• Dolor de cabeza: algunas personas pueden experimentarlo, debido a la liberación de toxinas en el cuerpo.
• Efectos sobre la presión arterial: la kombucha puede tener un efecto hipotensor, lo que significa que puede reducir la presión arterial. Si se consume en grandes cantidades o se combina con medicamentos para la presión arterial, esto puede llevar a una reducción excesiva de la presión arterial.